De momento, hoy os traigo una receta. Bueno, en realidad dos. Y es que muchas veces ponemos todo nuestro empeño en sorprender a nuestros amigos o familiares con nuestras dotes culinarias, nos ponemos nuestras mejores galas y una mesa de revista de decoración, cuando de repente, alguno de nuestros invitados es intolerante o alérgico a uno de los ingredientes de nuestra receta. Habiendo sufrido esta situación, he decidido enseñaros dos maneras de preparar nuestro ingrediente básico. Bueno, en realidad no ha sido una decisión meditada, sino que me pasó esa situación que os acabo de contar. Comida de amigas, charlas y cotilleos asegurados, yo que saco mis mejores galas en mi pequeño apartamento del centro y cuando ya estoy cocinando mientras bailo, me acuerdo de que una de mis amigas es alérgica al marisco. Acto seguido, manos a la cabeza, grito en el cielo, estado de desesperación. Seguro que alguna vez también os ha pasado, menos mal que yo en ese momento tenía a Ricky Martin para decirme que "bailando todo se arregla". Enseguida me puse a pensar en otra receta para ella, y enseguida se me vino a la cabeza, la segunda receta de hoy.
Así que hoy cocinamos para dos:
INGREDIENTES.
Fetuccini al Vongole.
400 gr. de Fetuccini.
500 gr. de almejas. 1 vaso de vino blanco.
1 tomate.
1 diente de ajo.
Pimienta Cayena (al gusto).
Sal.
Fetuccini al Pesto.
400gr. de Fetuccini.
Albahaca fresca (al gusto).
150-200 gr. de queso parmesano.
Un puñado de piñones.
1/2 diente de ajo.
100 l. de aceite de oliva Virgen.
Sal.
MODO DE PREPARACIÓN.
Fetuccini al Vongole.
- Poner las almejas a remojo con agua y sal durante 30 minutos para que suelten la arena.
- Cocer la pasta hasta que quede al dente. Reservar.
- Hacer el sofrito de tomate, picado en dados, el ajo laminado y la pimienta cayena. Incorporar el vino y dejarlo reducir un poco.
- Añadir las almejas y taparlo. Cocerlo hasta que las almejas se abran.
- Añadir la salsa a la pasta.
- Servir con un poco de perejil picado.
Fetuccini al Pesto.
1.
Añade un chorrito de aceite de oliva en una
sartén y tuesta los piñones alrededor 2 minutos.
2.
En un mortero, machaca muy bien medio diente de
ajo y una pizca de sal gruesa. Tiene que quedar perfectamente majado.
3.
Echa poco a poco las hojas de albahaca fresca
pero no las machaques. Mediante movimientos circulares, y con suavidad,
llévalas hacia las paredes del mortero, de este modo soltarán poco a poco todos
sus aceites esenciales y aromas. Cuando la albahaca ya haya soltado todos sus
aceites, añade los piñones y machácalo bien.
4.
Añade poco a poco el queso parmesano (finamente
picado o rallado) e intégralo bien en la mezcla. Por último agrega el aceite
poco a poco hasta que quede una mezcla homogénea.
5.
Cuece los fetuccini en abundante agua con un
poco de sal. Escúrrela pasta e inmediatamente sin remojarla añade el pesto
mezclando todo bien.
Tanto bailar a mí se me olvidó, pero si le añadís un poco de perejil picado por encima, la receta será inmejorable.
Los auténticos italianos hacen este pesto en morteros de mármol, pero yo lo hice en uno de madera y quedó genial. Además si os sobra no os preocupéis porque aguanta varios días en el frigorífico siempre que lo dejéis bien tapado. Así que se lo podéis añadir a otras comidas.
También podéis servir unos pocos más de piñones en un bol pequeño para añadir más.
TIPS.
- Los fetuccini es mejor que los cocinéis en último lugar, ya que este tipo de pasta es muy fina y si no se os quedará pegada. En este caso no es recomendable pasarla por agua fría.
- Si os sobra pesto y optáis por conservarlo, no os asustéis por su aspecto inicial. Es posible que le tengáis que añadir un poco de aceite para ligar de nuevo los ingredientes.
- Por cierto, se me olvidaba, el pesto lo podéis combinar de mil maneras diferentes: pizza gorgonzola con tomate natural, risotto, como aliño para las ensaladas, con pollo o con pescado. No dudéis en hacer mezclas, seguro que os sorprenderéis.
- Si sois un desastre como yo, porque yo lo tengo que reconocer, una buena opción es que tengáis en la cocina una pequeña libreta con las intolerancias o alergias que vuestros invitados puedan tener. Esto os ayudará mucho porque en muchas ocasiones podemos sustituir ese alimento por otro.
Y hasta aquí las recetas de hoy. Y a vosotras, ¿os gusta la pasta? ¿La preferís de manera más tradicional o sois de las que innováis en la cocina y probáis cosas nuevas? Contadme.