Buenos días chicas, ¿qué tal vuestra vuelta a la rutina después del día de descanso? Espero que volver a coger el ritmo no se os haya hecho muy duro. Yo tengo que confesar que esta mañana se me han pegado un poquito las sábanas, y es que cuando tu despertador suena a las 7:30, adoras esos cinco minutitos de más en la cama, ¿no os pasa?
Pero para intentar volver a la rutina lo mejor posible, os he preparado un outfit para combatir las prisas mañaneras. Si hay algo que me inspira a la hora de crear nuevos looks, son los viajes. Me encanta sentarme en las terrazas de las ciudades que visito y observar a la gente de ese país. Sus costumbres, sus hábitos, sus peculiaridades y, por supuesto, también su ropa. Éste look tiene algo que me recuerda a Londres, ese toque British del que siempre he estado enamorada. No sé si será el corte de la falda, o la combinación de los colores azul marino y verde botella, tal vez ese toque esté escondido en los detalles burdeos, o debajo del sombrero, que a menudo protege a las Londinensas de la lluvia tan característica. A lo largo de bastante tiempo, Londres ha sido una gran fuente de inspiración para mí, y es que, esa esencia British da mucho juego.
Además del estilo británico que tiene el look en conjunto, me encanta la combinación de colores. Si en verano adoro los colores vivos, los detalles minimalistas, los estampados y los colores cálidos, en invierno me transformo y encuentro en los colores más fríos la perfecta armonía con el ambiente otoñal. Los azules marinos, verdes botella, burdeos, borgoñas y marrones en sus diferentes tonalidades componen buena parte de mis estilismos diarios. En ocasiones, el rosa palo es un gran aliado, y este año quiero atreverme con algo en mostaza, pero sigo en proceso de dar el paso.
Falda: Mango (old)
Blusa: Zara (old)
Bailarinas: Gloria Ortiz (old)
Medias: Calzedonia
Sombrero: Zara (old)
Bufanda: Oysho
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